El cine en la calle de Arriondas

Recreación imagen de cine en la calle.

Miguel Menéndez, Julia Díaz, Ewan Sanchez

En Arriondas, capital del concejo de Parres, los vecinos del pueblo llevan más de una década disfrutando del cine en la calle, un proyecto puesto en marcha por Miguel Aramburu, amante y gran difusor de la cultura, en especial del cine, en el entorno local. Aramburu se ganaba la vida trabajando en el negocio familiar, pero gran parte de su tiempo libre lo empleaba en leer, ver películas, y «culturizarse», en general. Así, un buen día hace casi dos décadas, tuvo la idea de emprender un programa que ayudase a inculcar esta cultura en los jóvenes del concejo, creando el Cine en la Calle.

Desde entonces, todos los veranos ha habido muchas noches en las que la plaza de García Dory de Arriondas se ha llenado de personas de todas las edades, gustos y aficiones, reunidas para disfrutar de una película escogida por Aramburu, proyectada en la gran pared trasera del centro de salud. Desde películas infantiles hasta cine de terror o comedias españolas, pero todas con una finalidad: entretener a los vecinos del pueblo, y, al mismo tiempo, crear interés y afición por la cultura cinematográfica.

Tras muchos años poniendo toda su ilusión y su esfuerzo en este proyecto, Aramburu fue distinguido en 2015 con el Premio Fayuela, entregado anualmente por la Asociación de Amigos de Parres. También recibió una mención honorífica del Ayuntamiento de Parres por «enseñar a amar el cine» (1).

En 2020, el programa de Cine en la Calle se detuvo, debido a la pandemia, pero fue reanudado cuando las medidas sanitarias lo permitieron. En ese mismo año, Aramburu falleció en el hospital de Arriondas debido a una enfermedad inesperada que le había sido diagnosticada poco tiempo antes.

«Miguel fue una persona muy especial, y muy poco valorada por la alguna de la gente del pueblo» (2). «Estuve algunas veces con mis padres en el cine. Me lo pasé muy bien» (3). «El Cine en la Calle siempre me pareció una idea muy bonita. Una muy buena forma de impartir cultura y entretenernos en esas noches de verano» (4). «Una gran iniciativa por parte de Miguel, que hizo que muchos jóvenes se interesasen por el cine, algo que no cualquiera conseguiría tan fácilmente» (5). «Siempre me pareció una idea muy bonita, porque hacía recordar a los buenos tiempos, cuando aún había cines en los pueblos. Es muy importante conservar las buenas costumbres» (6). Preguntamos a varias personas que encontramos por el pueblo sobre su opinión acerca de El Cine en la Calle. Miguel Aramburu, en las respuestas, aparece como una persona muy querida y valorada.

Aunque hoy Aramburu ya no esté entre nosotros, ha dejado hecha una gran labor para el pueblo, que cuenta entre sus tradiciones con la de El Cine en la Calle, lo que un día comenzó como la sencilla idea de proyectar películas para que sus vecinos y amigos las disfrutasen.

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