Cruz y media luna de la capilla Santa Cruz de Cangas de Onís. Imagen: Claudia Otero.

Claudia Otero, Luana Crespo y Estefanía Diez.

Es una capilla de estilo rural asturiano, y su arquitectura se basa en la capilla de la Encarnación, desaparecida, y que pertenecía al palacio de Cambre, en Soto de Cangas.

Es acabada la Guerra Civil cuando se construye la capilla actual, puesto que la anterior fue destruida por una bomba y se incendió durante la guerra. Consta de una gran escalinata bajo un pórtico sostenido por una columna toscana que se sienta sobre un pedestal rectangular, en el que está esculpida una cruz de roble sobre una media luna que recuerda el escudo de Cangas de Onís. Por su parte norte descansa el pórtico sobre una pared rematada por una pequeña espadaña (campanario). La capilla es de forma cuadrangular sostenida por robustos contrafuertes.

En su interior se halla un dolmen que tiene más de 5000 años de antigüedad (es del Neolítico) en cuyas paredes se pueden admirar hermosas pinturas; en la del fondo hay una reproducción de la Cruz de la Victoria. En el muro sur se reproduce la lápida destruida en 1936, y también cuenta con una pequeña ventana en forma de arco que ilumina el interior.

La capilla de Santa Cruz fue construida por Favila para honrar la memoria de su padre Pelayo, y en ella se conservaba la cruz de roble que llevaba el rey en la lucha contra los moros, hasta que fue trasladada al castillo de Gauzón, donde fue recubierta de oro y pedrerías, para ser finalmente depositada en la Catedral de San Salvador (Oviedo) donde se encuentra actualmente.

La capilla primitiva fue construida en el año 737 e inaugurada el 27 de octubre del mismo año. Alfonso de Carvallo, historiador, dice en 1695 que es un simple humilladero al que más tarde se le añade el cuerpo de la iglesia.

Al terminar la guerra civil, Luis Menéndez Pidal, comisario del servicio de Defensa del Patrimonio Artístico Nacional, en colaboración con Capitel (alcalde de Cangas de Onís en el momento) y el escultor Gerardo Zaragoza, bajo el patrocinio de Regiones Devastadas (que dependía del Ministerio de Gobernación), es quien reconstruye la capilla. Desde entonces, en 1950, aparece como la vemos ahora y más arriba hemos descrito.

Preguntas a María Oliva Otero:

1- ¿Consideras que al ser la guía de la capilla, la percibes de manera diferente a los visitantes?

En general, la gente desconoce el valor histórico de la capilla de Santa Cruz. Por eso tratamos de insistir en su importancia y la del lugar donde se encuentra para que se comprenda su evolución a lo largo de los siglos.

2- ¿Cuál es el motivo de que el dolmen se encuentre en el interior de la capilla?

En la Edad Media se buscaba para legitimar el poder el apoyo de los viejos símbolos ancestrales, respaldo y prestigio de lugares entendidos como sagrados. Se encuentra en la vega de Contranquil, extendida entre los ríos sella y Güeña lugar de paso para los cazadores del Neolítico. En este lugar, se manifiesta la construcción de un montículo artificial en cuyo interior se disponía una cámara sepulcral edificada con grandes piedras u ortostatos del Neolítico, hace 5000 años, en el 3000 AC. El conjunto monumental, se conoce con el nombre de dolmen. Este tipo de monumentos, demuestran la presencia del ser humano ya en aquellos tiempos. Es habitual encontrarlos en lugares elevados, mientras que este dolmen, aparece en el fondo del valle, lo cual, es una de sus principales características.


3- ¿ Eres conocedora de la arquitectura de la antigua capilla y de sus diferencias con la actual?

La iglesia primitiva, de reducidas dimensiones, fue ampliada sucesivamente (la mayor reforma en 1632), dando lugar a una iglesia rectangular, de planta basilical, de nave única orientada de oeste a este (la puerta estaba en el lugar opuesto al actual), que se conservó hasta 1938, año en el que fue destruida. Se reedificó en el año 1943, siguiendo otros modelos de ermitas del barroco popular de la zona.


4- ¿Cuánta veracidad existe detrás de la leyenda de que se edificó para albergar la cruz de roble de Pelayo?

La iglesia original (en la actualidad desaparecida), fue edificada, según la crónica «Rotense «en honor de la Santa Cruz», por el rey Favila/Fáfila, hijo del rey Pelayo, en el 737, en Cangas de Onís, por entonces primera capital del reino y en ella, según la tradición, se depositó la cruz de roble que llevaba Pelayo en la batalla de Covadonga. Con ello el Rey Favila inicia una costumbre seguida posteriormente por otros monarcas asturianos, la de ser promotores de construcciones religiosas, y la de rendir un particular culto a la «cruz», que se va a convertir, aparte de su valor como expresión de la pasión de Cristo, en símbolo e imagen del poder en la realeza asturiana.


5- ¿Es verídico que fue Fabiola quién la edificó?

Durante siglos se consideró que la capilla había servido de entierro a su fundador, Favila, y así lo recoge Ambrosio de Morales en el s. XVI durante su viaje a Asturias, Galicia y León, y menciona que bajo la iglesia se conserva una cueva que “la gente del lugar consideran el enterramiento del Rey Favila, de la cual recogen tierra por atribuirla propiedades curativas”. Lo cierto es que el supuesto enterramiento real se demostró como una tumba prehistórica durante las excavaciones llevadas a cabo por Don Antonio Cortés Llanes y el Conde de la Vega del Sella a finales del s. XIX.


Fuentes:

  • DIEGO SOMOANO, Celso: Cangas de Onís. Señas de identidad.
  • Libro: Cangas de Onís. Historia de una parroquia.
  • Otero, María Oliva.