El Palación a principios del siglo XX, donde vivían los Condes del Sella [1]
Claudia Otero, Luana Crespo y Estefanía Diez.
El Palación o Casa de la Prida, según los hermanos García Ceñal, era una torre del siglo XIII al igual que otras ubicadas en el concejo, como las que existen en Soto de Cangas, Onao etc, con funciones como torres de vigilancia.
De su primera construcción no se conserva casi nada, puesto que a finales del siglo XlX era ya una casona muy reformada y de la que sólo se conservan contrafuertes, ventanas y portadas del siglo XVl y su vieja capilla.
Fue propiedad del duque Estrada, que era bisnieto de Don Gonzalo Fernández de Caso y Doña Mayor de Nava. La familia Caso aportó a los Estrada el patronato de la capilla de Santa Cruz, el curato de Santa Maria de Cangas de Onís, San Martín de Grazanes y el coto de Tornín, así como el derecho de pesca del río Sella. En la antigua iglesia se conserva el escudo de armas de los Caso.
«En el mercado de Cangas de Onís tienen los Estrada encima de la puerta y torre fuerte de su casa la leyenda que dice: «Yo soy de la torre de Estrada fundada en este peñasco, más antigua en la montaña que la torre de Velasco«.
Manuel Foronda en su novela «De Llanes a Covadonga«
Fue vivienda temporal de los Condes de la Vega del Sella hasta finales del siglo XlX. En 1810 la casa sufrió muchos deterioros puesto que las tropas francesas se defendieron en ella, siendo vencidas por los ejércitos españoles al mando de Don Salvador Escandón Antayo.
En el año 1906 fue colegio francés-español regido por la congregación Hijas de Santa María de la Providencia que tenían alumnas internas, medio pensionistas y externas a las que preparaban para el ingreso en la Escuela Nacional de Magisterio, a la vez que enseñaban piano, dibujo y francés.
En 1931 se instala el Instituto de Segunda Enseñanza, hasta que en 1936 se traslada al nuevo edificio construido en Contraquil.
Ocuparán el Palacio en 1936 las fuerzas republicanas de Manuel Sánchez Noriega (llamado El Coritu).
En 1952 se convierte en sede de la fundación Beceña González, se le añade el pabellón este y se construye una pequeña capilla, inaugurada el 11 de febrero de 1961. Asisten a su inauguración Camila Beceña, Ramón González, hermanas siervas de María de Anglet y los sacerdotes Daniel Duque, canónigo de Covadonga y Juan Bautista, párroco de Santa María.
Así llega a nuestros días como residencia de ancianos sufriendo tantas transformaciones que ya casi no se reconoce el antiguo caserón de la Prida. Hoy en día a su pabellón central se le añadieron dos más laterales que ocultan lo que en su día fue el verdadero Palación.
Fuentes:
Documentación:
- Libro «Ayer y hoy de la fundación Beceña González» de Marcelina Martínez.
- Página 149 del libro «De Llanes a Covadonga» de Manuel de Foronda.
Imágenes:
- [1] Página 26 del 2° tomó del libro Belmunt y Canella.
- [2] Libro de Marcelina Martínez
- [3] Claudia Otero