Fotografía de La Virgen de Seoriu, cedida por Esteban Fernández. Invierno 2011.
Yanira García Alonso y Alba Fernández López. La Virgen de Covadonga, mayormente conocida como La Santina por los asturianos, es un símbolo de gran importancia para ellos, pues según la leyenda, esta virgen obró un milagro en la Batalla de Covadonga que fue clave en la Reconquista. Por eso existen numerosas replicas y representaciones que hacen alusión a La Santina.
En el concejo de Amieva, sobre el tramo final del curso del río Dobra, se levanta la Sierra de Amieva. E un recóndito lugar de ella, siguiendo el camino del chorco de los lobos y llegando a la majada de Seoriu, podemos encontrar una curiosa y fascinante representación de La Virgen de Covadonga, tallada a mano sobre una piedra natural de la sierra. A pesar de representar claramente la figura de La Virgen de Covadonga, es conocida como La Virgen de Seoriu, por su localización en esa majada de La Sierra de Amieva.
La obra fue llevada a cabo por Tito el del 7, conocido así por su puesto de trabajo como operario del Saltu del Dobra en la boca número 7 del canal que, aún hoy, sigue conduciendo el agua desde la presa de La Jocica hasta la central hidroeléctrica de Campurriondi. Tito era además vecino del pueblo de Amieva, donde regentaba un bar-tienda bajo el nombre de El 7, en el que servía comidas a los trabajadores del Saltu.
Esta figura de La Santina es una pieza increíble que resulta desconocida para una mayoría de los asturianos, pero que merece la pena conocer. La ruta recomendada para llegar hasta ella supone llegar en coche hasta El Mirador de la Collada, en Amieva, y de ahí tomar el camino del Chorco de los Lobos, hasta llegar a la mencionada majada de Seoriu.
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Fuentes:
López, Ramón. Oriundo de Sames. Abuelo de la autora. 85 años.
Fernández Sanchez, Esteban. Oriundo de Sobrefoz. Padre de la autora. 46 años.