Crías de salmón en el río.
AM. Situada en Avalle, en la unión de los ríos Aspru, La Cerezal y La Beyera, la Piscifactoría Riu Aspru lleva desde el 19 de febrero de 1989 criando salmones para la repoblación de los ríos Sella y Cares. En el lugar hay dos personas encargadas cuyo cometido es contribuir a la repoblación sin dañar el ecosistema y a la conservación del desove natural.
«Es una pequeña ayuda al río».
Georlin Antonio de Diego Martínez.
Hasta que las crías de salmón llegan al río, pasan por un proceso largo y laborioso que se inicia en el mes de septiembre. En ese momento se cogen al azar, en la salmonera localizada en Cañu, 1 de cada 5 salmones, hasta un máximo de 25 hembras y 20 machos , y de acuerdo con las instrucciones de la Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial. Los salmones capturados son llevados a las instalaciones de Avalle y depositados en balsas cerradas y a oscuras.
Los cuidados, durante octubre, noviembre y diciembre, suponen una revisión cada 2-3 días, para examinar la barriga de las hembras y ver si está blanda; si es así, la hembra ha madurado y está lista para el desove. En el caso de los machos, la revisión no se realiza, pues durante esos meses siempre están listos para el desove.
Para la operación de desove los salmones son anestesiados. A la hembra se le realizan masajes en la barriga, para sacar los huevos, y el macho es desovado encima de la barriga de la hembra dejando que el semen entre en los huevos. Tras cinco minutos aproximadamente, se les añade agua y pasados veinte minutos en remojo, los huevos son lavados muy bien y colocados en bastidores, en el laboratorio. En ese momento están fecundados, pero hasta convertirse en embriones, hay que esperar a que la temperatura del agua donde se encuentran alcance los 250º/día. Para calcularlo, se mide la temperatura del agua dos veces al día, una a las 8 de la mañana y otra a las 5 de la tarde, con ellas se hace una media, se anotan y, al alcanzar los 250º/día, ya se pueden apreciar los ojos del embrión. Cuando llegue a 450º/día es cuando nace. Durante 2-3 semanas las crías se alimentan del saco vitelino. Pasadas esas semanas, se colocan en balsas adecuadas y se alimentan hasta los meses de marzo-abril, dependiendo de la época en se haya hecho el desove.
En junio, se liberan las crías en el Rio Sella y Cares, comenzado así la repoblación. En este momento miden unos 2-3 centímetros y para distinguirlos del resto de salmones del rio se les hace un pequeño corte en la aleta adiposa.
Otro método empleado en la repoblación, y que contribuye a la conservación del desove natural, es la introducción en enero y febrero de cajas viver, en cuyo interior hay huevos con embriones a punto de nacer. Estas cajas se colocan el lugares altos en el río, y no producen ningún daño en el ecosistema pues son biodegradables.
Habitualmente, se introducen alrededor de 180.000 crías de salmón al año, pero hay factores que hacen variar este número, como pueden ser la temperatura del agua del rio, la sequía y las especies invasoras. En 2022, debido a las pocas lluvias, la cantidad de alevines introducidos en el río ha sido menor.
Para que los efectos de la repoblación de un año sean visibles, como podría ser este 2022, son necesarios unos 3-4 años, por lo que hasta el 2026 no se podrá comprobar cómo ha repercutido la generación recién introducida.
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Martínez de Diego, Georlin Antonio, vecino de Avalle. Transmisión oral imágenes (2022).