Bufón de Cobijeru, Llanes, Asturias.
Olaya Rivero, Juliet Medina. El destino de algunas mujeres -desaparecer con cada inundación- cuando el agua se enamora de ellas, se mete dentro y las llama sin que puedan hacer nada, hace alusión a todas las mujeres que sufren maltrato y sienten miedo, incapaces de contar su historia, “ahogándose” en ella.
En la película Ana representa a todas esas mujeres que sufren, que cargan con miedos dentro de si, miedo a estar solas, miedo a marchar…
A lo largo del film, la protagonista se siente angustiada, como si se estuviera ahogando; incluso acude a la iglesia, quizá para encontrar alguna explicación ante sus sensaciones.
Cuando cae en la conclusión de que el río la está llamando, entre toda la gente, sabe que tiene que confrontar su vida con el agua. La partida conlleva lluvias, inundaciones terribles, pero se mete en el agua sin miedo. Y sobrevive.
Ana consigue aceptar el agua “dentro”, es decir aceptar que lleva miedos en su interior, pero que no le van a impedir contar su historia.
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Ilustración de Jazmín Menéndez Concha.
