Sergio Viego.
El novio de la protagonista es una persona joven desconectada de las supersticiones y de la vida del pueblo, pues lleva tiempo -según él, en el extranjero. No cree en las leyendas que circulan por el pueblo y decide continuar con la chica a pesar de las advertencias.
El segundo rol masculino lo encarna el padre del novio. Lleva toda su vida en el pueblo, se ha convertido en una persona respetada y, por su parte, cumple con las tradiciones al igual que con los prejuicios.
Marco Barrena.
La pareja de la chica, a mi parecer, es un ex-presidiario o ex-delincuente. Se puede decir que le entró el agua a él también y vive anclado a ese sitio.
El padre del chico, que lo acoge de nuevo en casa después de un tiempo fuera, parece otro de esos personajes que viven anclados a los sitios.
El “ligue” de la madre representa la percepción, sobre los hombres, que tienen las mujeres de esa casa. Otro hombre que sólo está de paso.